Título original: Kimssi Pyoryugi
Título español: Naúfrago en la luna - La isla de Kim
Director: Lee hae-joon
Año: 2009
País: Corea del Sur
Género: Drama - Comedia
Duración: 115 minutos
Género: Drama - Comedia
Duración: 115 minutos
Mi nota: 9.5/ 10
Un
título imprescindible.
Cuántas obras maestras habrá escondidas dispuestas a ser descubiertas... Con sólo dos personajes, se puede construir una gran historia, repleta de humor, crítica social, sentimientos humanos en estado puro y todo lo que se le puede pedir a una película.
El guión es sencillo a más no poder. Kim (él), ahogado por las deudas y completamente solo, decide terminar con su triste vida arrojándose al río Han. Sin embargo, termina en una isla en mitad del río de la que no puede escapar (no sabe nadar). Por su parte, Kim (ella) tiene una especie de agorafobia y vive aislada en su habitación, acomplejada por una quemadura en su rostro.
Ambos Kim son náufragos en un mundo de globalización, donde aparentemente lo importante y lo que nos hace ser mejores personas es tener un buen trabajo, dinero y una casa. Pero no es así, también existe la ilusión y la esperanza. La felicidad absoluta puede estar en soñar con comer un simple plato de fideos con judías.
Él está solo en su isla, obligado a sobrevivir en un mundo que desconoce, pero al que no tarda en acostumbrarse y en el que, por fin, consigue ser feliz. Es su hogar, la primera vez que vive en un lugar que no pertenece al banco.
Ella duerme en un armario, vive a oscuras y tiene síndrome de Diógenes entre otras muchas fobias. Vive su propia fantasía a través de internet donde se hace pasar por mujeres hermosas y le gusta fotografiar la luna. Lleva años sin salir de casa y se comunica con su familia por SMS. Está sola, pero parece feliz.
Tras la introducción de los personajes y la trama, da comienzo una hermosa historia entre dos personajes que en circunstancias normales nunca se hubieran conocido. Ella le descubre con su cámara y ahí se inicia un intercambio de mensajes, tan simple como emotivo. Y es que las cosas pequeñas son a veces mucho más importantes de lo que pensamos. No revelaré ningún detalle más, pero no dejes de verla si no lo has hecho ya.
Con unas actuaciones sencillamente maravillosas y un guión ágil y perfectamente dirigido, la película se hace cortísima y se disfruta de principio a fin. La combinación de situaciones dramáticas con un humor inteligente es sublime. No tiene desperdicio.
Si disfrutas con el cine auténtico y sin pretensiones, no deberías perderte esta película. Puedes empezar disfrutando de este pequeño tráiler:
Cuántas obras maestras habrá escondidas dispuestas a ser descubiertas... Con sólo dos personajes, se puede construir una gran historia, repleta de humor, crítica social, sentimientos humanos en estado puro y todo lo que se le puede pedir a una película.
El guión es sencillo a más no poder. Kim (él), ahogado por las deudas y completamente solo, decide terminar con su triste vida arrojándose al río Han. Sin embargo, termina en una isla en mitad del río de la que no puede escapar (no sabe nadar). Por su parte, Kim (ella) tiene una especie de agorafobia y vive aislada en su habitación, acomplejada por una quemadura en su rostro.
Ambos Kim son náufragos en un mundo de globalización, donde aparentemente lo importante y lo que nos hace ser mejores personas es tener un buen trabajo, dinero y una casa. Pero no es así, también existe la ilusión y la esperanza. La felicidad absoluta puede estar en soñar con comer un simple plato de fideos con judías.
Él está solo en su isla, obligado a sobrevivir en un mundo que desconoce, pero al que no tarda en acostumbrarse y en el que, por fin, consigue ser feliz. Es su hogar, la primera vez que vive en un lugar que no pertenece al banco.
Ella duerme en un armario, vive a oscuras y tiene síndrome de Diógenes entre otras muchas fobias. Vive su propia fantasía a través de internet donde se hace pasar por mujeres hermosas y le gusta fotografiar la luna. Lleva años sin salir de casa y se comunica con su familia por SMS. Está sola, pero parece feliz.
Tras la introducción de los personajes y la trama, da comienzo una hermosa historia entre dos personajes que en circunstancias normales nunca se hubieran conocido. Ella le descubre con su cámara y ahí se inicia un intercambio de mensajes, tan simple como emotivo. Y es que las cosas pequeñas son a veces mucho más importantes de lo que pensamos. No revelaré ningún detalle más, pero no dejes de verla si no lo has hecho ya.
Con unas actuaciones sencillamente maravillosas y un guión ágil y perfectamente dirigido, la película se hace cortísima y se disfruta de principio a fin. La combinación de situaciones dramáticas con un humor inteligente es sublime. No tiene desperdicio.
Si disfrutas con el cine auténtico y sin pretensiones, no deberías perderte esta película. Puedes empezar disfrutando de este pequeño tráiler:
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Lo mejor: un guión inteligente con una gran puesta en escena. En realidad, todo,
es una película redonda.
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Lo peor:
a ver... pues por ejemplo, el cartel. Hay varias versiones y alguna
no invita mucho a verla.
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