jueves, 19 de mayo de 2016

Wellcome back, Mr. McDonald

301.

Título original: Rajio no jikan
Título español: Bienvenido, Mr. McDonald - Tiempo de radio
Director: Koki Mitani
Año: 1997

País: Japón
Género: Comedia

Duración: 103 minutos
Mi nota: 9.0/ 10




Sigo repasando la filmografía de Koki Mitani, esta vez con su primer largometraje, un homenaje a las retransmisiones de seriales en la radio.

Una cadena de radio organiza un concurso de guiones para doramas de radio (los antiguos seriales) y resulta ganadora (y de hecho única participante) Miyako (Kyoka Suzuki), una novata en esas lides que ha creado un auténtico drama para la radio con la historia de una mujer luchadora que intenta lograr el amor de su vida. 

Los ensayos van muy bien y faltan pocas horas para que se escenifique en directo en hora de máxima audiencia. Pero comienzan a surgir los problemas: pequeñas correcciones de algunas líneas del guion. Hasta ahí todo bien, pero pronto la actriz principal (Keiko Toda) exige cambios en su personaje que se van llevando sobre la marcha, al tiempo que otros actores también exigen lo propio en respuesta y para no quedar atrás.

Así, la historia de amor entre una mujer que se gana la vida trabajando a media jornada en una sala de pachinko y un pescador de un pequeño pueblo costero de Japón, termina siendo algo "parecido" ambientado en Chicago y sus protagonistas transformados en Mary Jane,una prestigiosa e implacable  abogada que defiende a mafiosos italianos y que está casada con Heinrich, un alemán, pero que realmente ama a un piloto de naves espaciales de nombre Donald McDonald. Hilarante.

Divertidísima historia con momentos absurdos e improvisaciones constantes de un guion cuyo parecido al original es pura coincidencia. A todo ello hay que sumarle unos efectos sonoros necesarios para el nuevo argumento y que no estaban preparados, y una serie de personajes a cual más obcecado con lo suyo. La sobreactuación de algunos personajes en el dorama radiofónico es de lo más llamativo, así como las envidias y rencillas entre los principales actores.

El reparto es extenso y todos brillan a buen nivel, pero hay que destacar a Toshiaki Karasawa, actor fetiche de Mitani que aparece en todos sus títulos, y un joven e irreconocible Ken Watanabe, uno de los actores japoneses más internacional.

Una de las situaciones más hilarantes es la elección del nombre del protagonista, Donald McDonald, que adaptado a la fonética nipona resulta Donarudo MacuDonarudo, genial. Inolvidables también los improvisados efectos especiales adaptados a los continuos cambios de guion.

Huelga decir que me he reído y he disfrutado de principio a fin con esta película. 
 
- Lo mejor: un guion tremendamente divertido y lleno de sorpresas.
- Lo peor: ya sólo me queda ver una de Koki Mitani...

Puedes encontrarla AQUÍ

No hay comentarios:

Publicar un comentario